9/10/08

Acido

Con una peqeña sacudida mi sueño sale corriendo por la ventana de mi habitacion, sin mirar atras deja la manzana. Sin el sueño atandome los parpados, los abri para contemplar este nuevo dia, sin nada en mente, me levante de la cama, aun flotando en pensamientos sin sentido, recordando lo qe mi otro yo hizo mientras yo no estaba. Fui al baño a mojarme la cara, sientiendo la brisa de los arboles abanicandome la cara, con el sol sonriendo de felicidad por la muerte y la vida qe se generaba en el momento. Me lave el rostro y bebi un poco de agua y mientras me miraba egocentricamente al espejo una nube le grita a las demas qe vinieran a tapar el rostro del sol, el cual se llevaba todas las miradas, celosas corrieron a hacer su cometido. "Siempre es lo mismo" me dije mirandome a los ojos.

Los planes para hoy fueron destruidos por las palabras electricas del telefono, en ese momento odie las trasmisiones vibrantes, me dejaron nulo, por eso hoy estoi en blanco, sin nada en mente, pero recorde qe podria escribirle a una persona deseada, quedamos a las dos y media mas o menos, asi que me recoste en la cama gigante y esponjosa como si me lanzara al estomago de piel blanca de un oso polar, me tire a esperar. Pero no pasaba nada de nada, pasando horas y horas, y cuando deje de pensar en esperar pude recien escuchar la protesta a pocos centimetros de mis oidos, gritaban hace horas, pero nisiquiera eschuche un pitido, eran las tripas con carteles, antorchas y megafonos, todo por la unica razon de pedir un poco de alimento para saciarlas, sabria qe si aceptaba sus demandas estaria todo bien por unas horas, de lo contrario todo se podria venir a abajo, asi qe mejor fui a preparar algo para ellas. Cuando abri la puerta de la cocina escuche a la olla que me daba el mensaje que me dejo mi mama, decia algo asi "Paulo tu mama dijo qe me hecharas un poco de agua y un poco de mantequilla, me calientas y listo", eran tallarines blancos los que estaban dentro de la olla, decidi hacerlos con un huevo, trate de que no gritara tanto, pero es lo que hay no mas. Despues de tener todo encendi la radio para escuchar sus melodias, mientras almorzaba a las cuatro y media de la tarde...

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